El desierto cálido más grande del planeta es también uno de los sitios más apasionantes a los que viajar al menos una vez en la vida. Corazón del mundo árabe, lugar de antiguas rutas de caravanas y convivencia entre bereberes y tuaregs, este mar de arena te enamorará. Aquí tienes algunos consejos para que tus viajes al Sáhara sean perfectos.
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Contenido
Beber mucha agua
Las temperaturas del Sáhara pueden alcanzar hasta los 58ºC en los meses de verano. En consecuencia, llevar agua con nosotros en todo momento es un requisito vital para hidratarnos y no sucumbir a las altas temperaturas.
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Ser prácticos con la comida
Si os hospedáis bajo una jayma en un campamento propicio, no tenéis por qué preocuparos. Seguramente vuestros anfitriones se encargarán de abasteceros con suficiente carne y sopa de harina para reponer energías. Sin embargo, cuando se trata de alcanzar el oasis o salir de excursión, lo mejor será ser prácticos con la comida. Utiliza comida en lata (no requieren agua y son de fácil consumo), ten a manos frutos secos y no olvides las barritas energéticas.
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Usar el vestuario apropiado
Llevar agua, comida, gorra, gafas de sol y protector solar es básico para que no sufras desagradables sorpresas durante tu viaje por el Sáhara.
A la hora de adentrarte en el desierto durante el viaje por el Sáhara, lucir ropa cómoda es sumamente importante. Decántate por tejidos finos y suaves (como el algodón), utiliza gorras (o turbantes en su defecto), gafas de sol y pantalones no demasiado holgados pero tampoco demasiado ajustados. Aplicar crema solar cada cierto tiempo será imprescindible para garantizar la salud de tu piel.
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Llevar siempre mapas
En algunas de las solitarias tiendas que encontrarás en las rutas de tu viaje por el desierto del Sáhara los comerciantes aún venden mapas de hace más de treinta años. No obstante, estos pueden sernos perfectamente útiles en un desierto que prácticamente no ha cambiado. Optar por mapas offline almacenados en tu móvil puede ser otra buena opción. Pero, si tenemos que elegir, nos quedamos con el papel.
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No hacer planes
Durante los últimos años he conocido a más de una persona que planeó viajar al Sáhara Occidental y volver a los pocos días. Sin embargo, el magnetismo de esta tierra es tan impredecible como hipnótico. Muchos de esos viajeros finalmente decidieron alargar su estancia, convivir con las tribus nómadas o hacer una visita espiritual extra al corazón de este desierto del tamaño de China. En definitiva, lo mejor es no hacer planes.
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Respetar al máximo
Los contactos con otras culturas pueden poner a prueba nuestra capacidad para respetar a los demás. Por tanto, antes de ir de viaje por este desierto debes conocer cuáles son las normas de cortesía y consideración de su población, así como los rituales para sentarse a la mesa, sus creencias religiosas o reglas de vestimenta. Siguiendo estas normas evitarás problemas de entendimiento y comunicación con la población local.
Estos consejos para tus viajes al Sáhara te permitirán disfrutar de una de las experiencias más bellas y enriquecedoras en la que puede sumergirse un viajero. Siempre que, por supuesto, el respeto, la protección y cierto sentido de la aventura viajen contigo en la mochila.
Vive el Sáhara
Un libro: Hijas de la arena – Ana Tortajada
Una canción: Aziza Brahim – Julud
Una película: Wilaya
Un plato: Cuscús
