El país de los mariachis es uno de los destinos más vibrantes del mundo. Te proponemos un baño cromático a través de los lugares más coloridos de México.
Cuando pensamos en países coloridos, uno de los primeros que se nos vienen a la mente es México. En el país norteamericano los colores eclosionan a través de sus comidas y platos, el arte eterno de Frida y Diego, los banderines de papel y sus ciudades coloniales. Reescribimos la historia del color a través de los lugares más coloridos de México.
Guanajuato
Tras visitar México D.F., una de las excursiones imperdibles apunta a Guanajuato, Ciudad Patrimonio de la Humanidad cuyas casas de colores componen el mejor museo al aire libre. Púrpuras, verdes, rojos, amarillos o azules; en la Capital Cervantina de América hay cabida para todos los colores. Una carta de presentación que va más allá cuando hablamos de su vibra cultural, desde su famosa Universidad hasta las plazas del Baratillo o San Fernando, pasando por la leyenda del Callejón del Beso, la perfecta guinda a un paseo romántico por la ciudad. Sí, Guanajuato es muy padre.
Isla Mujeres
Cuentan que Ixchel, la diosa maya de la feminidad, la fertilidad y las lluvias, habitó hace cientos de años esta isla de Quintana Roo, en el Caribe mexicano. Las leyendas mitológicas parecen haber impregnado de color las calles y casitas del pueblo principal de esta isla paradisíaca, donde los balcones regalan fantasías cromáticas, el aroma del mango inunda cada rincón y la brisa del mar invita a una excursión de buceo en el Arrecife Manchones o una visita a sus santuarios de tortugas.
Campeche
Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, Campeche es una de las ciudades coloniales mejor conservadas no solo de México, sino quizás del mundo entero. Los colores aquí impregnan sus casas señoriales, en sintonía con los baluartes, los restos de su fortaleza o sus templos de encanto barroco. Además, la ciudad cuenta con un malecón ideal para sumergirse en sus historias, descubrir nuevos sentidos y saborear un legado que Campeche protege como su mayor tesoro.
Izamal
Yucatán es mucho más que cenotes, playas paradisíacas o iconos como Chichén Itzá. Un buen ejemplo de esta cara B lo encontramos en Izamal, una mágica ciudad embadurnada en amarillos ocres por decisión de sus propios habitantes tras pintar de este color el Convento de San Antonio de Padua en el siglo XX. Hoy Izamal es la única localidad de México pintada de un solo color, o la excusa para descubrir sus diversos patrimonios: desde las pirámides mayas de Kinich Kakmó e Itzamatul, hasta las calles donde pequeñas placas hablan de las leyendas de Izamal. Un oasis amarillo donde cada esquina, cada plaza, tiene algo que contar.
Tlacotalpan
Veracruz no es el estado más visitado de México, pero sí uno de los mejores a la hora de profundizar en el costumbrismo de este país. La localidad de Tlacotalpan supone un buen punto de partida al ser Patrimonio de la Humanidad y ofrecer un conjunto de atracciones irresistible. Esta acuarela urbana compuesta de muros, ventanales y fachadas de todos los colores invita a recorrer sus calles en bicicleta, admirar la artesanía de sus casas, visitar museos como el del artista Salvador Ferrando en Plaza Hidalgo, o asomarnos al río homónimo.
San Cristóbal de las Casas
En el fascinante estado de Chiapas encontramos San Cristóbal de las Casas, un pueblo de lo más cosmopolita famoso por sus colores, manifestaciones culturales y encanto. De hecho, está considerado como “el más mágico de los Pueblos Mágicos de México”. Un buen punto de partida es la Plaza 31 de Marzo, a donde siempre se vuelve tras visitar su flamante catedral, los coches vintage bajo banderines de colores en el Andador Real de Guadalupe, o iglesias como la de Guadalupe, franqueada por una escalera que nos sumerge en una capilla multicromática. Descubre estos lugares más coloridos de México con Horizonte Paralelo y déjate seducir por las historias que suspiran bajo sus fachadas cromáticas. Una forma “paralela” de aproximarnos a un nuevo destino, interactuar con los locales, conocer sus relatos y convertir tu próximo viaje en una aventura aún más inolvidable.
Vive México
Un libro: Temporada de huracanes – Fernanda Melchor
Una canción: México lindo y querido – Vicente Fernández
Una película: Roma
Un plato: Tacos de arrachera
