Desayuno.
Hoy ponemos rumbo a la vibrante ciudad de Galway, haciendo varias paradas en algunos de los paisajes más espectaculares de Irlanda.
Nuestra primera parada será el impresionante Parque Nacional de Connemara, una vasta extensión de montañas, lagos y valles que ofrecen algunas de las vistas más impactantes de la isla. Este parque es hogar de la icónica raza de caballos de Connemara y de una biodiversidad única que lo convierte en un paraíso para los amantes de la naturaleza.
Continuamos hasta Clifden, una encantadora localidad que destaca por su entorno salvaje y su rica historia. Aquí visitaremos la majestuosa Abadía de Kylemore, una joya arquitectónica del siglo XIX situada a orillas de un lago, rodeada de montañas y jardines victorianos. Esta abadía, hoy en día un monasterio benedictino, es uno de los lugares más fotografiados de Irlanda.
Seguimos la ruta disfrutando de la belleza de pequeños pueblos costeros como Ballyconneely y Roundstone, donde el tiempo parece haberse detenido y la vida fluye al ritmo del océano Atlántico.
Finalmente, llegamos a Galway, la bohemia ciudad del oeste de Irlanda, famosa por su ambiente animado, su música tradicional y sus coloridas calles. Considerada el alma cultural del país, aquí se respira la esencia más pura de Irlanda, la tierra del trébol.
Ruta del día 180 km / Alojamiento en Galway.