Lo hemos visto alguna vez en televisión: tenderetes de comida en países exóticos donde la gente come a su antojo mientras un vendedor espanta las moscas. “Nunca comeré en un sitio así”, piensas. Sin embargo, el acierto de comer en puestos callejeros cuando viajas a países asiáticos o africanos puede ser un golpe maestro, especialmente cuando se trata de estas ventajas de comer en puestos callejeros.
Sabores locales
A diferencia de esos otros restaurantes turísticos en los que degustar parte de la gastronomía local de un destino está sujeto a precios altos y calidad cuestionable, los puestos callejeros de street food suelen servir bocados elaborados por la propia gente de la calle. Personas que cocinan para esos vecinos o conocidos y entre los que siempre hay hueco para nuevos visitantes.
Precios más baratos
En la India, por ejemplo, comer un kebap en la calle cuesta 80 céntimos, a diferencia del precio doble o triple que puede costarte en un restaurante más “serio” u occidentalizado. Esto se debe a que los comerciantes venden sus platillos, generalmente, a un precio económico para los locales y, con suerte, a ti también.
Conocer la cultura
Cuando viajamos, el hecho de conocer un nuevo destino pasa por patearse todos los monumentos patrimonios de la Unesco y recurrir a esos otros tópicos del turista poco habituado. Detenerse en puestos callejeros implica fundirse con otra cultura, comer como ellos, y esta, amigos, es la mejor forma de viajar y conocer.
Comida saludable
¿Pero es seguro comer ahí? ¿Será higiénico? ¿Estará bueno? Si aplicamos la lógica plántate en una de las calles donde abundan puestos callejeros y fíjate en las colas de locales que se forman frente a uno u otro puesto. Tanta gente no puede estar equivocada, debe de estar bueno. El mejor indicativo a la hora de atrevernos a comer en un puesto callejero, sin duda.
Promover los negocios locales
Seguro que muchos sabéis qué es el ecoturismo. Una tipología que permite no solo proteger los espacios naturales de un cierto destino, sino también promover la economía del sector local mediante el consumo de su alfarería, servicios o productos naturales. Los locales que trabajan en puestos callejeros utilizan estos productos en sus platos, motivo por el que cooperar mediante el consumo de propuestas autóctonas encuentra en la comida callejera una de sus mejores representantes.
Estas 5 ventajas de comer en puestos callejeros te ayudarán a vencer los prejuicios y atreverte a explorar la cultura gastronómica de esas Bangkok, Nueva Delhi o Ciudad del Cabo donde comer en la calle no solo implica ir un paso más allá, sino que además de contribuir al desarrollo de una comunidad podrás decir que una vez comiste comida sudafricana original y estaba riquísima. Eso sí, con el tema del agua no seas tan arriesgado y sigue pidiendo botellitas de plástico o cristal para acompañar tus kebaps, noodles o salchichas boerewors.
¡Bon appétit!
Escrito por: Alberto Piernas