Ciertos países del mundo destacan por una flora y fauna únicos, desplegando unos escenarios en los que habitan especies animales que no pensábamos que existían, plantas psicodélicas salpicando selvas crujientes, o cascadas que parecen brotar desde el cielo; atracciones que conforman esos mejores destinos para disfrutar del turismo de naturaleza que os mostramos a continuación.
Costa Rica: el país más sostenible de América Latina posee un 4% de la naturaleza total del planeta comprendida en su territorio, moldeado por los océanos Atlántico y Pacífico. El país favorito de Jacques Cousteau engloba parques naturales convertidos en particulares mecas científicas entre los que destacan el Manuel Antonio National Park, ideal para los amantes del birdwatching, las cascadas de El Rincón de la Vieja, o la misteriosa Isla del Coco, la isla deshabitada más grande del planeta.
Madagascar: Tras separarse del continente africano hace más de 130 millones de años, la isla de Madagacar ha desarrollado un ecosistema propio convertido en uno de los grandes jardines del mundo. La Avenida de los Baobabs, con sus famosos árboles de raíces invertidas apuntando al cielo, la presencia del famoso lémur, del cual alberga hasta 100 especies diferentes, o un 80% de plantas que sólo existen en la isla, incluyendo especímenes como la orquídea cometa o el curioso aloe zombie, componen esta isla de ensueño.
Islandia: La última meca europea para aventureros empedernidos destaca por unos escenarios que quitan el aliento. A nuestro paso por el país nórdico encontraremos cascadas enormes que salpican los glaciares, volcanes como el Þríhnukagígur, cuya cámara de magma volcánico es la única visitable del mundo, o acantilados que surcan el parque nacional de ÞingvelIir, primer escenario de Islandia designado por la Unesco. ¡Ah! Y sin desmerecer un anochecer bajo las auroras boreales.
Indonesia: El país insular parece contener los vestigios de un mundo salvaje e inhóspito en el que tienen cabida desde algunos de los volcanes más mortíferos del mundo hasta plantas exóticas como la flor cadáver. En lo que respecta a su fauna, especies como el tigre de Sumatra, el elefante de Borneo o el dragón de Komodo son algunos de los exóticos miembros que habitan entre las playas y manglares, selvas y montañas de zonas como Wallacea, el grupo de islas protegidas que marcan la transición de Australia al continente asiático.
Australia: Además de contar con especies únicas como el canguro, el koala o el simpático marsupial numbar, el perfecto cruce entre ardilla y zorro, Australia es un destino ideal para los amantes del buceo o el snorkel. A lo largo de los más de 2300 kilómetros de Gran Barrera de Arrecife encontraréis habitantes tan simpáticos como las mantarraya, el pez payaso, el loro o el cirujano azul (sí, todos pensamos en Dory), además de uno de nuestros cetáceos favoritos: el tiburón ballena.
Estos destinos para disfrutar del turismo de naturaleza abarcan atracciones para todos los gustos: viajeros que adorarán perderse entre las épicas formaciones de Islandia, los que no pueden vivir sin un chapuzón entre corales y peces tropicales, o aquellos para los que el avistamiento de animales curiosos supone la quinta.
Escrito por Alberto Piernas.
Fotos: Flickr.com, Wil Stewart.